Viaje de 100 años

En los últimos días se ha hablado mucho con respecto al legado que se quiere dejar para las personas que vivirán en el Chile del 2110.

¿Pero será que esta cápsula dure los 100 años? O será ¿Qué nuestras futuras generaciones tengan el interés de abrir un pasado que para ellos no es interesante? Espero angustiosamente que estas preguntas no se hagan realidad, pero que pueden ser posibles.

Se dice que nuestro país tiene una alta actividad sísmica, por lo que me ha dado a pensar que por muy tecnológica que sea la cápsula, ni dios quiera en un tiempo mas se produzca desastre natural, de tales proporciones que llegue a abrir el terreno donde se encuentre la cápsula e escrupulosos la abran por curiosidad, todo el esfuerzo hecho se derrumbara en un par de segundos, matando toda la ilusión que se ha generado en torno a que nuestros nietos o bisnietos conozcan más de el país que a nosotros nos ha alojado.

Por otro lado me inquieta la posibilidad de que en el futuro las personas pierdan el interés por aquello que para ellos es parte del pasado, que no se sientan parte de esta tierra la que vio nacer a sus orígenes y que solo se preocupen por sobrevivir o vivir en su mundo, para mi esto es lo que seria la finalización de nosotros como chilenos, es decir, se derrocharía por todo aquello que se nuestros antepasados y nosotros mismos estamos tratando de enseñar a ellos con esta idea de guardar nuestro presenta para que se transforme en el pasado del Chile del 2110 por lo que no me gustaría estar dentro de este viaje de 100 años que la cápsula del bicentenario emprenderá en unos días mas.

Ricardo Aguilera Puelle. Trabajo social.

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